En Frigorífico Temuco nos aliamos con el Sector Público y la Sociedad Civil en la remoción de escombros y el cierre perimetral en Altamira I, el primer paso para construir una sede social en esta comunidad.
El valor de aportar a la comunidad
“Este tipo de alianzas nos recuerda que los desafíos se superan mejor cuando se enfrentan juntos. Gracias Altamira I por dejarnos ser parte. Seguimos construyendo comunidad”, afirmó el equipo de Frigorífico Temuco en un comunicado publicado en sus redes sociales.
Los vecinos de Altamira I estaban en riesgo de perder la zona que, antes de la intervención, estaba abarrotada de escombros y deshechos.
Los voluntarios de Frigorífico Temuco, en alianza con el gobierno municipal y la sociedad civil, nos encargamos de limpiar, cercar y preparar el terreno para, más adelante, convertirlo en un lugar de encuentro para la comunidad de Altamira I.
Comprometidos con Altamira I
“Cada uno hizo su parte”.
El objetivo en conjunto fue “salvar” un terreno que estaba en riesgo y ese logro no hubiera sido posible sin el compromiso de todos.
En este proyecto, los vecinos se encargaron de la organización de la jornada y se unieron las cuadrillas para “trabajar por su futuro”; por su parte, la alcaldía, liderada por Roberto Neira Aburto, ayudaron a agilizar las gestiones y brindaron un acompañamiento profesional durante todo el proceso, mientras que la representación de Frigorífico Temuco fue clave para la obtención de recursos y mano de obra calificada.
“El resultado fue más que un terreno despejado. Fue la alegría de los vecinos. La esperanza de una comunidad que ahora tiene un lugar donde reunirse, planear y proyectarse”, cierra el comunicado.
Frigorífico Temuco aportando a la comunidad
La faenadora destaca que su propósito va mucho más allá de la producción de carne. Frigorífico Temuco está comprometido con la comunidad; ya que, como han destacado en más de una oportunidad, su crecimiento empresarial está intrínsecamente ligado al bienestar de “nuestra gente” y su entorno.
Para la empresa, invertir en la comunidad es igual a construir un futuro más sólido y equitativo para todos; bien sea a través de la educación, la salud o, como fue el caso del proyecto Altamira I, en el desarrollo social de comunidades que lo requieren.
Con iniciativas como esta, la empresa ha logrado construir relaciones de confianza y respeto mutuo; lo cual ha permitido entender mejor las necesidades de la comunidad y responder de manera efectiva, generando un impacto positivo real que beneficie a todos los habitantes.
Esta es una muestra de empresas comprometidas con sus valores.
